En los últimos años, a la hora de enfrentarse al tratamiento de lesiones en sus pacientes,  los profesionales de la medicina deportiva están prestando cada vez más atención a lo que ellos llaman «cadena cinética», o lo que es lo mismo, la relación directa que tienen unas partes del cuerpo sobre otras a la hora de realizar movimientos (para que nos entendamos: el hueso de la cadera está conectado al hueso de la rodilla y este al del pie, etc).  Como consecuencia de esta «cadena cinética», y como hemos dicho aquí en diversas ocasiones, hace tiempo que se ha descubierto que tener una cadera débil aumenta la inestabilidad del corredor y el riesgo de padecer lesiones en las rodillas.

Una relación similar puede existir entre el dolor que aparece en el tendón de Aquiles (y zonas adyacentes) y la debilidad de los músculos glúteos, según sugiere un estudio publicado en la prestigiosa revista Medicine & Science in Sport & Exercise.

relación entre la lesion tendón de Aquiles y el glúteo

Investigadores australianos reunieron dos grupos de corredores masculinos con características similares, con la excepción de que un grupo no había tenido ningún tipo de lesiones en los Aquiles durante el último año, mientras que los corredores del otro grupo padecían dolores en la zona cuando realizaban actividades físicas. Durante el estudio, ambos grupos hicieron tiradas cortas (a unos 6 min/km) a la vez se les controlaban neuromuscularmente los glúteos, observando cuándo se activaban los músculos, de qué forma y por cuánto tiempo.  A los corredores con dolor de Aquiles, la activación de glúteos en relación con el apoyo del talón se produjo más tarde que en los que no padecían dolor en la zona, y la activación de los glúteos se prolongó durante un tiempo más corto.

Esto es potencialmente importante ya que una zona glútea más débil puede causar un aumento de la rotación (aducción) de la cadera interna (movimiento hacia la parte media del cuerpo). Esa inestabilidad en las caderas, a su vez, puede conducir a una sobre-pronación, que se cree que contribuyen a los problemas de Aquiles.

Los investigadores señalan que no está claro a partir de su estudio si el dolor de Aquiles de los corredores provocó un cambio en la activación de los glúteos, o viceversa. Aún así, sentencian que el trabajo de refuerzo en la zona para los corredores con lesión en el tendón de Aquiles, se debe considerar seriamente.

Una vez más, se confirma científicamente que no todo está en el calzado, por muy minimalista que sea; es fundamental un buen trabajo de fortalecimiento muscular, técnico y propioceptivo.

Salud!

Estudio: http://journals.lww.com/acsm-msse/Abstract/publishahead/Neuromotor_Control_of_Gluteal_Muscles_in_Runners.98220.aspx
Fuente: http://www.drnicksrunningblog.com/achilles-injuries-linked-to-gluteal-muscle-weakness/

1 Comentario

  1. Me gusta el enfoque de tus últimos post. Es menos «minimalista-taliban» y más enfocado en la técnica de carrera. Como siempre digo, correr eficiente no depende del calzado.

    Cualquier preparador físico o fisioterapeuta decente te va a hacer mucho hincapié en la importancia del fortalecimiento de la musculatura para evitar lesiones. Lo que pasa es que somos muy gandules, y preferimos que nos manden unas plantillas o zapatillas con control de pronación que ponernos a trabajar la técnica y fortalecer la musculatura.

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