- 19 Nov 2012, 11:07
#12287
Saludos,
Desde septiembre estoy empezando a correr muy poco a poco con calzado minimalista (salgo de una larga lesión lesión como comentaba en mi presentación). He empezado a ir al gimnasio, con la intención de empezar a recuperar ritmo, perder algo de peso e ir fortaleciendo las piernas y mejorar mi técnica.
Tras un par de meses de gym me apunté a mi primera carrera de la temporada (La Carrera Solidaria del BBVA - versión 5 km y pico). Las corrí con unas Merrell Bare Access, estrenándome en una carrera oficial con zapas minimalistas (o de transición). Hizo un día de perros pero, sorprendentemente, conseguí una muy buena marca para lo que estoy acostumbrado: 26:29, a un ritmo de 4:55. Me sorprendió correr a este ritmo, ya que a inicios de temporada rondo los 6 ó 6,30 min/km, así que termino empapado de la lluvia que cayó pero con muy buenas sensaciones.
Las agujetas han sido bestiales, pero las considero normales para ser mi primer contacto con el asfalto.
Tras dos semanas recuperando y entrenando en cinta, el viernes me dio por venir de casa al gimnasio de al lado de mi curro corriendo (7 km). Aprovechando que a mitad de camino tengo que atravesar el parque del Retiro, me he quitado los zapatos y lo he atravesado a pelo (1,5 km). La sensación ha sido bestial: al principio en camino de arena fina iba con cuidado, y al salir al asfalto empecé a notar que mi cuerpo me pedía más velocidad. Le puse cabeza y no forcé el ritmo, centrándome en las sensaciones que me venían de los pies. No me podía imaginar la de sensaciones que te llegan al cambiar el tipo de asfalto o pisar las hojas y ramitas por el camino.
De momento el fin de semana no he tenido ningún tipo de molestias, por lo que hoy lunes he repetido, con unas sensaciones muy similares a las del primer día (de buenas). En el gimnasio un poco de yoga y baño de agua caliente (como recomienda Danny Dreyer en su libro "El Correr Chi") y como nuevo a trabajar.
Me han entrado ganas de ir todos los días corriendo al gimnasio desde casa, así como de ampliar mi recorrido descalzo, pero quiero tomármelo con tranquilidad e ir disfrutando paso a paso. Mañana vendré al gimnasio en tren, que veo que me empieza a entrar el ansia y quiero tomarme las cosas con tranquilidad.
Que tengáis una buena semana.
Desde septiembre estoy empezando a correr muy poco a poco con calzado minimalista (salgo de una larga lesión lesión como comentaba en mi presentación). He empezado a ir al gimnasio, con la intención de empezar a recuperar ritmo, perder algo de peso e ir fortaleciendo las piernas y mejorar mi técnica.
Tras un par de meses de gym me apunté a mi primera carrera de la temporada (La Carrera Solidaria del BBVA - versión 5 km y pico). Las corrí con unas Merrell Bare Access, estrenándome en una carrera oficial con zapas minimalistas (o de transición). Hizo un día de perros pero, sorprendentemente, conseguí una muy buena marca para lo que estoy acostumbrado: 26:29, a un ritmo de 4:55. Me sorprendió correr a este ritmo, ya que a inicios de temporada rondo los 6 ó 6,30 min/km, así que termino empapado de la lluvia que cayó pero con muy buenas sensaciones.
Las agujetas han sido bestiales, pero las considero normales para ser mi primer contacto con el asfalto.
Tras dos semanas recuperando y entrenando en cinta, el viernes me dio por venir de casa al gimnasio de al lado de mi curro corriendo (7 km). Aprovechando que a mitad de camino tengo que atravesar el parque del Retiro, me he quitado los zapatos y lo he atravesado a pelo (1,5 km). La sensación ha sido bestial: al principio en camino de arena fina iba con cuidado, y al salir al asfalto empecé a notar que mi cuerpo me pedía más velocidad. Le puse cabeza y no forcé el ritmo, centrándome en las sensaciones que me venían de los pies. No me podía imaginar la de sensaciones que te llegan al cambiar el tipo de asfalto o pisar las hojas y ramitas por el camino.
De momento el fin de semana no he tenido ningún tipo de molestias, por lo que hoy lunes he repetido, con unas sensaciones muy similares a las del primer día (de buenas). En el gimnasio un poco de yoga y baño de agua caliente (como recomienda Danny Dreyer en su libro "El Correr Chi") y como nuevo a trabajar.
Me han entrado ganas de ir todos los días corriendo al gimnasio desde casa, así como de ampliar mi recorrido descalzo, pero quiero tomármelo con tranquilidad e ir disfrutando paso a paso. Mañana vendré al gimnasio en tren, que veo que me empieza a entrar el ansia y quiero tomarme las cosas con tranquilidad.
Que tengáis una buena semana.