Muy buenas...
Casi cinco meses sin escribir por aquí... Quizá lo primero sería dar una explicación, pero no hay otra que la frustración producida por una lesión que no acaba de irse. Desde finales de marzo decidí no dar un paso más a la espera de una mejora sustancial de mis aquiles que no veía cerca. Aún así, y no recuperados estos del todo, en este mes he comenzado a combinar caminatas con trotes muy cortos y suaves. La idea me vino de algún amiguete que practica Streak Running (básicamente correr todos los días, cada cual con un límite en tiempo o distancia que dependerá de su experiencia, capacidad de sacrificio, objetivos...). Según me lo planteé el Streak Running tiene dos importantes ventajas: la primera es evidente, te obliga a salir en muchos días que de otra forma no lo harías y la segunda, más sutil, TE OBLIGA A DOSIFICARME MUY CUIDADOSAMENTE a fin de no romper esa racha de salidas contínuas por una molestia por exceso de entrenamiento. Me pareció una muy buena forma de ir recuperando poco a poco el tono haciendo a la vez una transición muy prudente. Decidí entonces salir al menos una milla diaria (poca cosa como véis) y completar el resto del tiempo disponible ese día con caminatas a buen ritmo, de tal forma que hoy he completado la 27ª sesión ininterrumpida. Todo ello con zapatillas minimalistas (principalmente las Merrell Trail Glove) y solo esporádicamente descalzo, aunque mi idea es ir añadiendo kilómetros de caminata por asfalto a pie desnudo. De momento las molestias no han aumentado sino que han seguido disminuyendo durante estas semanas, aunque al mismo e insoportablemente lento ritmo de antes. Mi idea es segtuir con esa milla el tiempo necesario hasta la recuperación, aprovechando entre tanto para "transicionar"
En fin, espero haber aprendido de mis errores y que este segundo intento de hacer una transición al minimalismo sea el definitivo.
