¡Dolorido ataca de nuevo! Lo primero que quiero hacer es agradeceros a todos los comentarios y los ánimos. Y pediros disculpas por no contestar antes. El minimalista dolorido no se ha esfumado, pero hasta hace poco ha avanzado tan poco en el 'procès'

que no merecía la pena reseñar los avances. Siguiendo los consejos de matternhorn, neocochense y otros foreros, aplicando la 'cabeciña' y el 'sentidiño' recomendados por Hama. Así que en mayo paré, y me limité a hacer ejercicios regulares de fortalecimiento, a pasar horas con el rulo, la bola, haciendo tablas de estiramientos, y sobret todo, pasando todo el día descalzo, lavándome los dientes, cocinando y fregando a la pata coja. Mientras, mucha bici y entrenamiento funcional, insistiendo mucho en la musculatura de la estabilidad (me niego a usar 'core'), abdominales, lumbares, glúteos, ...
Consulté a un entrenador especializado en minimalismo, pero no dio buen resultado.*
A partir de mediados de junio empecé a trotar minutillos en la andadora con unas Merrell mientras me pasaba el día escuchando mi lista 180 de Spoty hasta meterme el metrónomo en el encéfalo. Algún día hacía rectas de 50 metros descalzo aprovechando que el gimnasio tiene un patio amplio y limpio.
A partir de mediados o finales de junio empecé a salir al monte con unas Innov8 de 6mm de drop, pateadas rápidas con bastones, y poco a poco empecé a correr en los tramos llanos y de subida.
La mala noticia es que al día siguiente de cada salida me dolía lo de siempre (ya os lo sabéis); la buena es que me duele mucho menos, y sobre todo que me recupero a toda velocidad. Apenas una molestia a levantarme, y para después de desayunar, olvidado.
. He empezado a correr con un amigo sedentario, fumador con sobrepeso que, rodeado de maratonianos y triatletas como está, ha decidido dejar de fumar y empezar a correr, con una app de esas de 'corra usted 5K en un mes'. A él le viene bien la compañía (todo esto es un secreto, claro

) y mi experiencia, y a mí su compañía y motivación. Un acuerdo perfecto. Como su entrenamiento se basa en el CaCo, y hace tiradas de un minuto correr tres caminar, y aumentando los tiempos progresivamente, a mi me viene como pisha al culo. Para este inicio he corrido con unos escarpines para agua que solía usar en la piscina, y que al quitarles la plantilla interior se quedan completamente planos.
Por fin, la semana pasada conseguí unos huaraches **, más cómodos y adecuados que los escarpines, y estoy encantado. Aunque me está costando ajustarlos, son una maravilla. Lo bueno es que después de trotar un ratillo (sigo en términos de minutos), me apetece correr descalzo, y estoy descubriendo las sensaciones, que me gustan cada día más. Nunca me había planteado correr descalzo, pero ¿quién sabe?
De momento sigo con el programa del 5K y pateando monte, con la idea remota, aunque no definitiva de intentar correr la próxima San Silvestre.
Una cosilla más, el otro día tuve que calzarme mis abandonadas zapatillas de carrera por monte amortiguadas, ya que por un asunto de trabajo necesitaba llevar los pies bien protegidos. Estuve un par de horas de pie, y veinte minutos escasos caminando con ellas. Fue un auténtico infierno. Los pies se me han adaptado a la libertad, y no soportan el presidio.
Mi calzado ahora consiste en los huaraches, unas sandalias Vivo Barefoot, los escarpines de agua, unas Merrell viejas que uso en el gimnasio (mis primeras minimalistas), otras Merrell para diario, días frescos o lluviosos, y una botas de Decartón, de 29€ a las que al quitarles la plantilla las dejas en 0 y que me van de maravilla para los días fríos e incluso de nieve.
Eso es todo, pero faltan dos notas:
* Si alguien va a consultar a algunos de los
profesionales que recomienda la web de zapatillasminimalistas, que me pegue un toque. He tenido una mala experiencia y no me apetece contarla en público, pero si alguien me contacta por privado y me dice que va a recurrir a éste concreto, le cuento lo que ha pasado. Si no es, se lo digo, y listo.
**Siempre he sido partidario de comprar a comerciantes y productores locales. Busqué unos huaraches frabricados aquí en una tienda de aquí, y el resultado fue decepcionante. Mala atención, escasísima oferta, poco afán de informar y colaborar, y precios elevados. Encontré unos que fabrica y vende una web de Estados Unidos, y el precio, transporte incluido, la calidad, la atención, el servicio postventa y la disposición han sido excelentes. ¡Una pena!