Salida 125 | 22.5.16 - 11:00h | 25 Km (2+21+2)- Huaraches 10mm - Ciudad y Trail
Dreiländerlauf (media maratón) - 1:35:02"
Pues con el dedo gordo vendado encima de las huaraches 10mm (puesto que había unos 5km de trail) y mi nueva camiseta pirata (departamento minimalista, ver foto

)del nuevo club, puesto que todavía no tenemos camiseta oficial, salí de casa una hojita antes de la salida para ir trotando y que me de tiempo para todo. Parece mentira pero el tiempo vuela entre recoger el dorsal, calentar, charlar, el ultimo ππ y Pang! salida. Esta vez al menos quería poder revisarme bien los nudos de los huaraches, que al final siempre tengo que salir con sensación de que se van a soltar y me da rabia.
BarefootRunningClub.jpg (37.99 KiB) Visto 9259 veces
La idea era correr una media rápida. Quedé con mi compañera de club Serena, de Singapur, pesa 40 Kilitos, tiene una cadencia de unos 196ppm y una marca de 1:28'. Nos encontramos antes de salir y estava claro que los dos estábamos nerviosos, tocaba sufrir. Según se mirara el tiempo podía acompañar o estar en contra. Teníamos unos 22° soleado. Para un cordobés sin duda un día ideal, para gente de la helvetia era un día abrasador

. Antes de salir se me ocurrió meter la gorra entera en la fuente y ponermela tal cual, ummm, una gozada. De los huaraches poco que decir, casi nadie se percató o me preguntó algo. Imagino que ya lo tengo tan asumido que no me fijo en si se fijan.
Serena quería salir en primera línea. Con el respeto que le tengo yo a esa zona de salida. Como es una carrera pequeña se puede. Nos pusimos en 3 linea, detrás de los africanos, que no habían podido venir pero sus sustitutos suizos si, jeje. PANG! y salimos echando castañas. Es curiosa la sensación de todavía ver la calle libre delante de ti, pero vamos, que dura hasta doblar la esquina. Como me imaginé salimos calentitos, 3:50/km marcaba el reloj, cagëntó. Y así nos tiramos los primeros 4 km entre "too fast" y "slow down" a unos 3:55/km y 4:00/km. Curiosamente me sentía bien, sin ir demasiado tostado, pero claro, las cifras son las cifras y asuntan. Estaba claro que teníamos que ir bajando. Hasta ahora no he mencionado que había un tercer corredor con nosotros, Jason. Un inglés de poco más de 50 tacos que se chupa las medias en menos de 90 minutos sin darle mucha caña. Allá que vamos bordeando el rio Rin y camino a la frontera francesa. El ritmo comienza a corregirse a los 5km donde encontramos un cómodo 4:10/km bajo el sol. Yo llevaba ya unos 3km con la lengua hecha un estropajo (vamos, casi desde la salida). Nos dan agua en el 5km y le doy a penas un sorbo, el resto me lo tiro por la cabeza (y que gustico que da). Vamos atravesando el pueblo francés y enfilando hacia el otro lado del rio para atrevesar el puente que nos lleve a Alemania. A partir de aquí mi compañera empieza a quedarse atrás. No pierde mucho el ritmo pero se nota que no va tan fresca (no me extraña, con el calor que hace). 24° no son mucho, pero corriendo y bajo el sol vaya que si se nota. Subimos las escaleras del puente (unos 30 escalones) y me doy cuenta que Serena no está como para tirar cohetes. Intentamos animarla. Hemos bajado a 4:20/km. No está mal pero la idea era de ir a 4:10/km. Espero pacientemente a que se reponga de ese trecho para intentar ir poco a poco subiendo de nuevo. Pasados 3 km tenemos otra subida. La cosa no pinta muy bien. Mucho calor y mucha discontinuidad. Intento tirar pero Serena sigue atrás. Voy esperandla. Otros 2km a unos 4:35/km y bajando. Uff, noseyonoseyo. Otra subida por un camino estrecho donde la mitad de la gente va andando y la otra mitad grita: "go go go go". El sol no perdona y llevamos ya 10km cuya curva de ritmo parece un tobogán sin fin. Técnicamente todavía no hemos petao pero tiene toda la pinta de terminar en esos términos. Llegamos al pueblo del Alemania donde quizá está mi suegra mirando la carrera (va a ser que no) y bajamos los metros subidos para comenzar los kms de trail por el bosque camino de nueva a Suiza. Por esos caminos de tierra nos espera de nuevo agua. Saco mi sobrexcito de Totem Sport (agua de mar) y me lo tomo de un trago sin apenas notar el sabor extremadamente salado que sentí la primera vez que lo tomé en mi casa después de un entrenamiento. Serena da por primera vez señales de vida para decirme que no se encuentra bien. Hago señales a Jason para que tire para adelante que ya me quedo yo con ella. Habíamos quedado en correr juntos y así será. Además, hace un día excelente para mirar el cielo y no el reloj. Imagino que cuando uno peta no le apetece quedarse solo. Es increíble cómo puede cambiar la percepción de la carrera cuando uno cambia el chip. No quiero decir que una cosa sea mejor o peor. Pero es distinto. Seguimos deslizandonos por el bosque con paso algo pesado. Su mirada asiática está fija en el horizonte y ninguna de mis bromas manchegas consigue desprenderla del trance. De todas maneras sigo con disciplina a su lado, ya no delante tirando sino hombro con hombro. Muchos corredores nos iban adelantando poco a poco, pero nosotros estábamos ajenos a esa carrera. La verdad es que se convirtió casi en algo épico donde la meta era LA META. llegar era todo, y el camino era hermoso. Llegamos al puerto de basilea. Solo queda seguir el rio, otro puente para arriba y el último km cuesta abajo. Hace rato que no vamos más rápido de 5:00/km. Se me ocurre llamar por teléfono a mi mujer para preguntarle si van a la meta y los chiquillos quieren correr unos metros (siempre me hace mucha ilusión). La verdad es que es la primera vez que me pongo a llamar por teléfono en medio de la competición pero... porque no?. Total, llega el último puente, lo conocemos de sobra, entrenamos aquí casi todas las semanas, estamos en casa leñe, ya estamos, la subidita de los c*j*nes y ya. Aprovecho, como siempre, para liarla parda y a los pocos espectadores que pillo me pongo a hacer el Simeone, no falla, la gente se enciende, les encanta, y a mi también. Alla que vamos subiendo el puente, es el último esfuerzo, y que se puede decir cuando en el km 20 cuando uno lleva ya las piernas cansadas (de cardio iba muy cómodo) y sabe que esto ya se acaba y se le abre semejante espectáculo con el rio Rin presidiendo y la catedral (Münster) a su vera y al fondo Francia a la izquierda y Alemania a la derecha, de donde venimos, de donde regresamos de la batalla malheridos pero orgullosos, vamos, una pasada. Final del puente y pa bajo. Aquí solo hay que dejarse rodar hasta la linea de meta. Parecía coser y cantar y.... joder, calambre en el gemelo derecho

, pero ostras, si voy de rápido como en un entrenamiento, ehh?. Será que voy deshidratado?, mucha cuesta? tampoco han sido tantos metros de desnivel. Ni idea, comienzo a concentrarme y voy talonando con el pie derecho para que el calambre no me paralice. Lo voy consiguiendo pero me impide apretar mucho en la cuesta abajo. Por fin recuperamos nuestros 4:10/km añorados. Un poco tarde pero que más da. No nos van a amargar este momento con detallitos sin importancia

. A unos 100md e la meta veo a mi mujer y mis hijos. Y aquí si se me para el reloj, comienza mi momento estelar, mi delicia, lo que de veras me hace llorar, no quepo en mi de ver los ojos desorbitados de mis peques y esa furia que tienen los chicos cuando de verdad lo dan todo porque no quieren nada. Y entramos en meta con un padre chorreante de felicidad en un día caluroso para correr.
en meta con Serena y mis chicos dreilaenderlauf2016.JPG (42.7 KiB) Visto 9259 veces
Curiosamente hicimos 1:35:02" (dos segundos más que en Albacete). Sin embargo fueron carreras tan distintas, con emociones tan dispares. No dejo de asombrarme como correr, algo aparentemente tan sencillo, puede ser tan complejo y rico en el mundo de las emociones y las vivencias.
Os cuento que Serena al final se quedó la segunda de su categoría (F20). Yo el 35 de la M40. Me alegro que se llevara un podium. Imaginaos, de haber parado y quedarse por el bosque tomando una insolación a subir a podium. No esta mal, verdad. Será que merece la pena no rendirse

. Yo de premio me llevé una ampolla en el dedo 4 del pie.... SIII del izquierdo. Una ampolla en forma de chupachups Kojak, de los que tenían un chicle dentro, si, del mismo color, muy impresionante (no hay foto, so morbosos

). Y yo me pregunto: porqué? pensé que tenía ya superada esa fase, y más de semejante magnitud. Seria el calor, las cuestas, o simplemente que estuvimos unos 8km dandole mucha caña. No quiero ni imaginar cómo sería si hubieramos terminado a 4:10/km. Uff, de buena me libré.
Se me quedan muchas cosas en el tintero pero... la verdad es que me pongo a escribir y me enrollo más que el sushi.
Correr es una pasada, rápido o lento, da igual, eso es solo un detalle.
saludos | joseja