- 05 Jul 2017, 12:12
#40619
Ya me presenté en el foro comentando mis inicios al minimalismo.
Llevo tres semanas haciendo una transición pausada y tranquila.
Tengo 49 años, 1,87 cm y 75 kg de peso, con más de 20 años corriendo amortiguado y los últimos seis años haciendo sólo trail running.
Tras una lesión en el 2014, condropatía rotuliana, me medio sobrepuse y seguí haciendo trail running a mi manera: regulando mucho, parando mucho entre salidas, fortaleciendo cuadriceps y mucha elíptica. Terminé así muchas carrera, algunos varios ultras y muchísimas salidas de entreno. Todo por montaña.
Este mes de marzo al terminar la Perimitral de Benissa, la rodilla ya dijo basta. Tras las pruebas médicas y la resonancia me diagnosticaron lo que ya sabía, la condropatía rotuliana y, además, una meniscopatía interna degenerativa y osteocondritis en el cóndilo femoral externo.
Toma la decisión de parar definitivamente porque me dolía mucho la rodilla, incluso en reposo.
Retomo en serio algo que me atraía mucho desde hace años y que le llevaba dando vueltas en la cabeza, correr minimalista, pero por tiempo, por no perder la "forma" o yo que sé no lo había hecho en serio.
Ahora, con tiempo, sin prisa, sin "forma" y con mucha ilusión he empezado a correr descalzo.
No busco curar mis lesiones, pues creo que no tienen solución, sino intentar poder correr algunos días por semana, sin dolor y seguir disfrutando de lo que siempre he hecho: correr.
Aparte de los días que dedico a aprender a correr descalzo hago tres días de gimnasio con fortalecimiento general y elíptica, todo eso descalzo.
Llevo andando descalzo ya mucho tiempo y usando zapatilla minimalista de 5mm de suela y huarache de 10 mm.
Empecé hace tres semanas, saliendo la primera semana dos días corriendo 2' y 3' respectivamente; la segunda semana tres días: 5', 5' y 7'; la tercera semana, en la que estoy, me tocan tres días 7', 7' y 10'.
Acompaño todos los días que salgo a correr descalzo con técnica de carrera y ejercicios para mecanizar la nueva forma de pisada.
Me cuesta, me cuesta bastante, porque debo ir muy atento para apoyar de medio pie y terminar suavemente con el talón, porque a veces, sin darme cuenta, meto el pie directamente plano.
En estos principios voy muy despacio, no busco cumplir con la cadencia de los 180 ppm porque bastante me cuesta ir centrado en mecanizar la pisada.
Noto sobrecarga en el sóleo izquierdo, sólo en el sóleo izquierdo y no en el derecho, no se si será por mi dismetría (tengo la cadera derecha más baja que la izquierda).
Me surgen muchas dudas. ¿hay que levantar mucho las rodillas en la zancada?, ¿hay que levantar mucho la pierna por detrás en la recogida?, ¿tengo que permitir que mi pie izquierdo entre plano y el derecho con el apoyo del talón?.
Lo cierto es que estoy muy, muy contento con esta nueva manera de correr, descalzo.
Siento mucha sensación de libertad, las sensaciones me gustan mucho, aunque mis pies aún no estén "curtidos" para la carrera descalzo.
He corrido un día con zapatilla minimalista y no es lo mismo, no me gusta ya llevar zapatillas, siento los pies prisioneros dentro de la zapatilla.
Llevo tres semanas haciendo una transición pausada y tranquila.
Tengo 49 años, 1,87 cm y 75 kg de peso, con más de 20 años corriendo amortiguado y los últimos seis años haciendo sólo trail running.
Tras una lesión en el 2014, condropatía rotuliana, me medio sobrepuse y seguí haciendo trail running a mi manera: regulando mucho, parando mucho entre salidas, fortaleciendo cuadriceps y mucha elíptica. Terminé así muchas carrera, algunos varios ultras y muchísimas salidas de entreno. Todo por montaña.
Este mes de marzo al terminar la Perimitral de Benissa, la rodilla ya dijo basta. Tras las pruebas médicas y la resonancia me diagnosticaron lo que ya sabía, la condropatía rotuliana y, además, una meniscopatía interna degenerativa y osteocondritis en el cóndilo femoral externo.
Toma la decisión de parar definitivamente porque me dolía mucho la rodilla, incluso en reposo.
Retomo en serio algo que me atraía mucho desde hace años y que le llevaba dando vueltas en la cabeza, correr minimalista, pero por tiempo, por no perder la "forma" o yo que sé no lo había hecho en serio.
Ahora, con tiempo, sin prisa, sin "forma" y con mucha ilusión he empezado a correr descalzo.
No busco curar mis lesiones, pues creo que no tienen solución, sino intentar poder correr algunos días por semana, sin dolor y seguir disfrutando de lo que siempre he hecho: correr.
Aparte de los días que dedico a aprender a correr descalzo hago tres días de gimnasio con fortalecimiento general y elíptica, todo eso descalzo.
Llevo andando descalzo ya mucho tiempo y usando zapatilla minimalista de 5mm de suela y huarache de 10 mm.
Empecé hace tres semanas, saliendo la primera semana dos días corriendo 2' y 3' respectivamente; la segunda semana tres días: 5', 5' y 7'; la tercera semana, en la que estoy, me tocan tres días 7', 7' y 10'.
Acompaño todos los días que salgo a correr descalzo con técnica de carrera y ejercicios para mecanizar la nueva forma de pisada.
Me cuesta, me cuesta bastante, porque debo ir muy atento para apoyar de medio pie y terminar suavemente con el talón, porque a veces, sin darme cuenta, meto el pie directamente plano.
En estos principios voy muy despacio, no busco cumplir con la cadencia de los 180 ppm porque bastante me cuesta ir centrado en mecanizar la pisada.
Noto sobrecarga en el sóleo izquierdo, sólo en el sóleo izquierdo y no en el derecho, no se si será por mi dismetría (tengo la cadera derecha más baja que la izquierda).
Me surgen muchas dudas. ¿hay que levantar mucho las rodillas en la zancada?, ¿hay que levantar mucho la pierna por detrás en la recogida?, ¿tengo que permitir que mi pie izquierdo entre plano y el derecho con el apoyo del talón?.
Lo cierto es que estoy muy, muy contento con esta nueva manera de correr, descalzo.
Siento mucha sensación de libertad, las sensaciones me gustan mucho, aunque mis pies aún no estén "curtidos" para la carrera descalzo.
He corrido un día con zapatilla minimalista y no es lo mismo, no me gusta ya llevar zapatillas, siento los pies prisioneros dentro de la zapatilla.