En realidad lo de apuntar a las 12 con los pies es para conseguir que sean las rodillas las que flexionarse apunten también a las 12. Pero esto solo ocurre si tus pies están correctamente alineados con tus rodillas. Para comprobar si lo están o no prueba lo siguiente:
Colócate en posición de
estirar el sóleo contra una pared. Asegúrate de que tus
pies están paralelos (apuntado hacia las 12) y que
flexionas todo lo posible la pierna de atrás
sin que se levante el talón. Intenta relajar todo lo posible la pierna de atrás y mira hacia donde apunta esa rodilla. Si apunta justo hacia delante eso significa que tus pies están alineados con tus rodillas y que debes correr hacia las 12. No! al medio día no! quiero decir con los pies apuntando a las 12

.
Si tu rodilla va apuntando cada vez más hacia dentro a medida que flexionas quiere decir que estás un poco torcido. En este caso deja que la punta del pie vaya girando hacia afuera hasta que sea la rodilla la que apunte al frente. Una vez que la rodilla apunta al frente estira las piernas. Aunque tus pies queden girados esa es tu posición correcta, porque lo que más nos importa es que sean las rodillas las que apunten al frente. Ya que los tobillos tienen más capacidad de adaptación, especialmente si corres descalzo.
Se puede hacer con las 2 piernas a la vez o de una en una (cada una puede tener una alineación distinta). Pero es importante que la pierna esté relajada ya que puedes estar haciendo fuerza para girar la rodilla hacia dentro o hacia afuera, estropeando el cálculo.
Espero que te sirva de ayuda.
Saludos.