- 25 Abr 2012, 19:28
#7152
Hola a todos,
si hace un mes me hubieran dicho que había tanta gente adicta a esto de correr minimal, hubiera pensado que me estaban vacilando o exagerando. Ahora estoy contento de que sea verdad. Llevo más de veinte años corriendo "normal", participando en pruebas y entrenando bastante. En este tiempo he tenido mejores y peores momentos, he tenido lesiones (más o menos graves), se me han caído las uñas unas cuantas veces, he hecho buenos tiempos en carreras (bueno, para ser un orgulloso corredor globero popular), me he hecho plantillas para "mejorar" mi técnica y me he estampado varias veces con muros invisibles. Nunca me ha gustado mucho competir contra los demás, pero sí ha habido una época en la que me gustaba probarme y exigirme para ver hasta dónde podía llegar. Y claro, un día, hace casi dos años, llegué al traumatólogo, porque las rodillas dijeron: ¡basta!. El médico (también corredor) me aconsejó fisioterapia y un muy largo reposo si quería volver a correr alguna vez y no acabar con bastón en unos años.
La verdad es que le hice caso porque me asustó bastante. Estuve unos cuantos meses sin correr nada, yendo al fisio. Luego volví a correr muy suave otra vez, y desde entonces no he vuelto a parar, pero sigo con molestias en los ligamentos de las rodillas. La diferencia es que en estos meses me replanteé mi forma de correr y los motivos por los que lo hacía. Al final decidí seguir entrenando haciendo caso exclusivamente a mi cuerpo y no a cierto tipo de consejos como: "Si hicieras series a no sé cuanto y te metieras tal tipo de entrenamiento, en tal o cual carrera te ibas a salir, porque tú vales 2.55 en maratón o 1.22 en media". La lesión hizo que me replanteara los entrenamientos y las compañías en mis carreras, y empecé a entrenar sin presión disfrutando de la compañía y de la actividad en sí. Y la verdad es que estaba bastante contento así. Hasta que uno de mis compañeros me pasó el libro "Nacidos para correr". Si os digo la verdad, no estaba muy animado a leerlo, pero le veía a él tan motivado que pensé darle una oportunidad. Pues bueno, el resultado es que después de bucear mucho por la red mientras devoraba el libro (me enganchó desde la primera página, pero tenía que comprobar que lo que aparecía allí era auténtico), he decidido que me voy a pasar al bando de corredores descalzos minimalistas.
Siempre da un poco de vértigo adentrarse en algo nuevo, pero estoy muy motivado y confió en que me ayudéis con vuestros consejos y experiencia para irme guiando en la transición y con todas la dudas que me vayan surgiendo. Ya he leído muchos de los foros de esta web y por eso, no me he puesto plazos y estoy recopilando información (tal vez demasiada...) sobre planes, técnica, material... Mi plan es empezar en verano, aprovechando que estaré en zona de playa casi dos meses y puede resultar más sencillo. Eso sí, lo único que me gustaría es poder estar dentro de un año corriendo lo mismo que ahora, pero sin suelas. ¿Cómo lo véis?
Espero que estemos en contacto. Y gracias a todos.
si hace un mes me hubieran dicho que había tanta gente adicta a esto de correr minimal, hubiera pensado que me estaban vacilando o exagerando. Ahora estoy contento de que sea verdad. Llevo más de veinte años corriendo "normal", participando en pruebas y entrenando bastante. En este tiempo he tenido mejores y peores momentos, he tenido lesiones (más o menos graves), se me han caído las uñas unas cuantas veces, he hecho buenos tiempos en carreras (bueno, para ser un orgulloso corredor globero popular), me he hecho plantillas para "mejorar" mi técnica y me he estampado varias veces con muros invisibles. Nunca me ha gustado mucho competir contra los demás, pero sí ha habido una época en la que me gustaba probarme y exigirme para ver hasta dónde podía llegar. Y claro, un día, hace casi dos años, llegué al traumatólogo, porque las rodillas dijeron: ¡basta!. El médico (también corredor) me aconsejó fisioterapia y un muy largo reposo si quería volver a correr alguna vez y no acabar con bastón en unos años.
La verdad es que le hice caso porque me asustó bastante. Estuve unos cuantos meses sin correr nada, yendo al fisio. Luego volví a correr muy suave otra vez, y desde entonces no he vuelto a parar, pero sigo con molestias en los ligamentos de las rodillas. La diferencia es que en estos meses me replanteé mi forma de correr y los motivos por los que lo hacía. Al final decidí seguir entrenando haciendo caso exclusivamente a mi cuerpo y no a cierto tipo de consejos como: "Si hicieras series a no sé cuanto y te metieras tal tipo de entrenamiento, en tal o cual carrera te ibas a salir, porque tú vales 2.55 en maratón o 1.22 en media". La lesión hizo que me replanteara los entrenamientos y las compañías en mis carreras, y empecé a entrenar sin presión disfrutando de la compañía y de la actividad en sí. Y la verdad es que estaba bastante contento así. Hasta que uno de mis compañeros me pasó el libro "Nacidos para correr". Si os digo la verdad, no estaba muy animado a leerlo, pero le veía a él tan motivado que pensé darle una oportunidad. Pues bueno, el resultado es que después de bucear mucho por la red mientras devoraba el libro (me enganchó desde la primera página, pero tenía que comprobar que lo que aparecía allí era auténtico), he decidido que me voy a pasar al bando de corredores descalzos minimalistas.
Siempre da un poco de vértigo adentrarse en algo nuevo, pero estoy muy motivado y confió en que me ayudéis con vuestros consejos y experiencia para irme guiando en la transición y con todas la dudas que me vayan surgiendo. Ya he leído muchos de los foros de esta web y por eso, no me he puesto plazos y estoy recopilando información (tal vez demasiada...) sobre planes, técnica, material... Mi plan es empezar en verano, aprovechando que estaré en zona de playa casi dos meses y puede resultar más sencillo. Eso sí, lo único que me gustaría es poder estar dentro de un año corriendo lo mismo que ahora, pero sin suelas. ¿Cómo lo véis?
Espero que estemos en contacto. Y gracias a todos.