Nuestro amigo Titín nos escribe la crónica de un viaje hacia la profundidad del macizo de Gredos y, por qué no, también hacia el interior de uno mismo. Las duras horas de caminata subiendo y bajando pedregales, donde la atención se centra en cada paso que damos, nos permite despejar la mente del humo de la cotidianidad y sacar a relucir lo que verdaderamente tiene valor en nuestras vidas.

Titin Circos de Gredos con Merrel Trail Glove

He aprendido mucho en esta travesía, como minimalista, como lo natural te hace más resistente en las peores condiciones y como sentir cada paso te puede saturar los sentidos, como si padeciéramos el Síndrome de Stendhal.
Y como neófito senderista el sentimiento del montañero, que a mi parecer queda reflejado de forma sinigual en la siguiente frase:

Existen hombres que suben a las montañas

por la sola alegría de vivir,

por el goce experimentado en la lucha,

por el sólo deseo de arrancarles su misterio,

por el sólo placer de conocerlas»

Pegasus (@correrdescalzos)

www.correrdescalzos.es

Senderismo Barefoot por Sierra de Gredos

El viernes 9 de agosto salimos desde Sevilla poco después de las 13 h. Tras una parada para comer y 450 km llegamos a Guisando, donde nos dimos un fresco baño en la piscina natural del pueblo situada en la entrada del camping. Cena semipaleo en el pueblo, subida al aparcamiento del Nogal del Barranco(1080 m) y dormimos allí mismo, al razo y sobre el duro suelo, aunque alguno pasó la noche de vigilante nocturno.

A la mañana siguiente tras desayunar, Juanca y Rafa con Inov8 Ttrailroc-235, Antonio con Vivobarefoot Neo Trail y yo con Merrel Trail Glove, nos presentamos en apenas dos horas y media en la cumbre de la Mira (2.343 m).

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Casi 1200 m de desnivel positivo pasando por el maravilloso «Galayar«, en esta ocasión subimos por «La Apretura», aprovechando la escasa sombra que aún nos ofrecía este inmenso conjunto de agujas graníticas.

Tras las fotos de rigor en esta atalaya natural, bajamos a la fuente del antiguo y ruinoso refugio de » Los pelaos», donde comemos algo, llenamos nuestras botellas y reanimamos nuestros pies en la gélida agua que brota del suelo.

Seguimos nuestra marcha hacia el oeste, siempre por la elegante divisoria de las aguas, con fantásticas vistas tanto por el norte como por el sur. Poco antes del «Puerto de Candeleda» viramos hacia el norte y tras pasar cerca de la «Plataforma de Gredos» llegamos al «Circo de Gredos». Lo primero baño en la «Laguna Grande», localizamos un buen lugar y montamos el campamento, pillamos unas cervecitas frías en el refugio y cenamos. A continuación empezó el espectáculo, aún con la tienda montada dormimos a «saco pelao», noche sin luna estrelladisima y, gracias a «Las Perseidas», adornada con decenas de fugaces.

Primera jornada con más de 10 h de marcha, más de 2000 m positivos , mucha tertulia y risas, muchas y medicinantes risas.

A la mañana siguiente nos levantamos sin prisas, somos los últimos en desmontar la tienda después de desayunar. Hoy solo llevamos dos mochilas, con comida, agua y algo de ropa, la ruta es circular y por la tarde acamparemos de nuevo en la misma zona.

De inicio algo más de 700 m de desnivel sin descanso y a un fuerte ritmo nos llevan a la cumbre del Almanzor en una hora. El último tramo impresionante, cresteando con mucho patio y escalada pura y dura para llegar a la pequeña cumbre. Vistas alucinantes, charlas con otros montañeros y fotos.

Nos ponemos en marcha de nuevo por la cresta y ahora toca La Galana, otro pico al que hay que subir trepando. Igualmente tiene una cumbre muy reducida, pero en esta estamos solos, es una cumbre secundaria y menos visitada.

Titin en La Galana de Gredos con Merrell Trail Glove

De esta nos tiramos casi literalmente, la bajada es durisima hasta la Laguna Cimera, la más alta de «Cinco Lagunas», -600 m de desnivel en apenas un km de recorrido. En la orilla de esta descasamos, comimos y dentro de ella nos bañamos, alguno la cruzó nadando.

Seguidamente subidón hasta la Portilla del Rey y otra fuerte bajada hasta el fondo de El Garganton, una nueva subida y echamos a correr hasta llegar, sobre las 19 h , de nuevo a La Laguna Grande.

Esta segunda noche cambiamos de dormitorio, nos vamos más arriba, junto a una preciosa poza de granito donde cae una cascada, donde nos hemos bañado y tomado los últimos rayos de sol de la tarde.

Desde nuestro emplazamiento hay una privilegiada vista de la laguna, las cumbres, el refugio y su entorno, de nuevo dormimos con las estrellas como techo.

Para la tercera mañana decidimos irnos al refugio y desayunar huevos con tomate aliñado, todo un lujo. Nos colocamos el «chinchorro» en la espalda y deshacemos el camino de antes de ayer. Saliendo del circo tomamos un camino alternativo que nos lleva al Puerto de Candeleda por una zona desconocida, pasando por las ruinas de un antiguo refugio de caza que frecuentaba en su día Alfonso XIII y posteriormente por otro personajillo de la historia española.

Tercer día de marcha, otras 9 h de caminata y de nuevo baño reparador en la poza de la puerta del camping de Guisando. Alquilamos dos habitaciones en un hostal vecino, ducha y cenamos un primer y un segundo plato cada uno…..jajajaja.

Tras dormir en una cómoda cama, pero sin un cielo estrellado al que mirar, cinco horas de coche y a casa.

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1 Comentario

  1. Impresionante Titín… Los años a unos le pasan facturas..y en cambio se los abonan!
    Espero que os libereis de las lesiones!

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